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Una leona descubre que la cierva que comerá está embarazada. Lo que hace con el feto es insólito

“Las escenas que siguieron nos tenían a todos estupefactos”, cuenta un guardabosques.

Una de las principales diferencias que tenemos entre nosotros, los seres humanos, versus los animales, es que estos operan por instinto y nosotros por raciocinio. Nuestra capacidad de pensar nos lleva a tener libertad en nuestras acciones y nos otorga el poder de decisión. Sin embargo, algunos animales parecen que también poseen consciencia, como esta leona que al notar algo, sintió culpa.

En el transcurso del safari, el guardabosque Gerry Van Der Walt vio como una leona comía a un antílope, algo a lo cual estaba acostumbrado. Sin embargo, la felina al ver que su comida estaba embarazada, detuvo su impulso animal y demostró sentir culpa por lo que hizo.

Este es el relato del guardabosque que, junto a las imágenes, cuentan una conmovedora y humana historia.

“He visto a un león matar presas que estaban embarazadas, pero normalmente sólo seguían alimentándose como si nada estuviera mal”, cuenta el guardabosques.

“Pero esta vez las escenas que siguieron nos tenían a todos estupefactos. Una vez fuera de la madre, la leona colocó muy suavemente al feto en el suelo y pasó un buen rato oliendo e investigando al animal aún no nacido“, relata.

“La leona trató de ver si el feto seguía vivo y cuando supo que no lo estaba, lo escondió cuidadosamente detrás del arbusto. Ella se quedó cerca de él por algún tiempo. También dejó de comer el antílope madre y parecía arrepentida por lo que había hecho. Su amor maternal era visible por la forma en que llevaba cuidadosamente al bebé muerto para “enterrarlo”, afirma.

“Observamos como ella caminó cuidadosamente hacia el matorral donde ella colocó el feto cuidadosamente en el fondo de la hierba larga. Ella lo empujó un par de veces otra vez con su nariz, mirando a su alrededor todo el tiempo como si estuviera esperando ayuda o peligro”.

¿En qué estaba pensando? ¿Por qué reaccionó así?

Si bien ni nosotros ni el guardabosque puede responder estas incógnitas, lo cierto es que la leona mostró algo de remordimiento luego de asesinar a una antílope que cargaba con un bebé. Quizá ella también era madre y recordó a sus cachorros.

Lo cierto es que después de este extraño ritual, no hizo más que recostarse a metros de la antílope que atacó, donde permaneció por bastante tiempo. Quizá, meditando en sus actos.